jueves, octubre 22, 2009

La Mochila


Me permito un momento para compartir con quien transite por este espacio la historia de la Mochila de Miguel, aquella que surgió como excusa para demostrar y actuar por iniciativa propia, resolver una necesidad básica (el no tener más que una vieja y raida mochila a punto de la extincion por los años y el uso)... triste estaba, pero poco... con ganas de que el asistencialismo vivido por su paso en diversos organismos le trajera esta vez una reemplazante para esa ya inutil compañera escolar... Pero entonces surgió la pregunta.. ¿ Y si hacemos juntos una mochila?, ¿Pero Cómo???? humm.... ah, sí.. tenemos una bolsa con trozos de cueros reciclados de un Taller que se hizo el año pasado... a ver... a ver..

Y así comenzamos, rescatando retasos, como un puzzle Miguel se lanzaba a crear la que sería su mochila, con un poco de excepticismo miraba esas piezas desarmadas, maltratadas y lanzadas al desuso, ¿Lograríamos revitalizarlas?... pasaron mas de dos meses, una vez por semana, llegaba él con una bolsa de esas que usamos para ir a la feria, en ella sus cuadernos y materiales, a diario asistía a clases, y llegaba cada jueves con el compromiso de hacer tareas y trabajar un poco en la dichosa mochila...

No todo trascurrió armonicaménte, el primer problema fue el dolor, sus manos no aguantaban mucho esfuerzo, por lo que trabajamos un rato cada uno con la maquinita, perforando a mano los materiales para luego unirlos... a veces se notaba triste, queria avanzar más rapido.. pero sus manos le dolían...
Las cosas mejoraron con el nuevo tratamiento de cremas que le dio el médico para sus manos

Continuamos la tarea, logramos armar las partes delanteras y traseras de la mochila, los lados... a unir lo que queda, ya en la recta final sucedió un cuasi desastre, la mochila desapareció... todos buscando, culpandonos por la pérdida... justo Miguel se enfermó, y la mochila no aparecía... entre la frustración de ver el trabajo, los esfuerzos y el empeño en cada puntada... se nos apretaba el pecho por la injusticia que sería para él haber perdido su mochila.... seguimos buscando, revisamos cada espacio de la oficina, le preguntamos a todos.. y nada.
Entonces buscamos una solución, le compraríamos una mochila en reemplazo de la otra... yo porfiada y algo bruta, seguía despotricando contra nuestra culpa como adultos de haber perdido la mochila (¿quién la tomó, cómo nadie se fijó...?), con un poco mas de tristeza, me fui un día jueves... llegó el Lunes y habían buenas nuevas, la caja con los materiales había aparecido (en la bodega donde 5 personas distintas habíamos buscado sin encontrar nada) la alegria para todos "si apareció la caja, debe estar allí la mochila!!!!!!"... pero la Ruth (quien realizo el descubrimiento) afirmo que solo era la caja, nada de mochila... sin creerlo y nuevamente porfiada me fui a la dichosa bodega a buscar... y la ví, allí mismo, donde tanto miramos... ahí estaba, quieta como sacandonos la lengua....

La respuesta a ese hecho extraño fue... "La abuelita fantasma" personaje que deambula por la casa asustandonos de vez en cuando, algunos la han visto, los que la conocieron en vida dicen que era fanática del orden.. que quizás nos castigó por desordenados....

Uff... con esa buena nueva comenzó la tarea final, allí la mochila paso por varias manos solidarias y otras no tanto... cada uno hasta llegar al día de hoy, finalizada y con solo una tarea más, escribir las iniciales del propietario en ella

La cara de Miguel era de esas que hacen que las malas ondas se te olviden de sopetón, su sonrisa era tan amplia, creo que no lo ví en todo este tiempo sonreír de esa manera, él estaba feliz, su trabajo rendía frutos, en sus manos la prueba de fuerza, de su convicción, de su creatividad.

Hoy fue uno de esos días en donde la alegria de quienes te rodean te contagia
gracias Miguel por tu sonrisa !!!

jueves, octubre 08, 2009

Ironía


Tus risas falsas contaminan al colectivo
que dice estar de acuerdo...
El rostro burlesco se guarda entre tu lascivo accionar
desde el peldaño superior observas y juzgas

Mi máscara esta tallada por imposibilidades
no logro transformar mi rabia en una cínica sonrisa
solo me quedo en silencio,
observo y escucho tus burlas solapadas

Cómo puede ser que la trasformación mostruosa
se acompañe de la calentura anecdótica
que solo hay un ¿hombre? en la jornada....
no deberia causar locura temporal en mis féminas colegas

Se avinagra mi espíritu entre tanta estupidez...
lameculos, espinitas... chupamedias
intentos de parodias ridiculizantes de la vida

Observar desde lejos....
me inmoviliza,
reaccionar desde cerca...
gatilla un tsunami de criticas "irónicas" que ya no quiero oir.

No te quiero escuchar!!!!!!!!!