domingo, marzo 22, 2009

Tarde... siempre

Frecuentemente llego tarde,
ha sido desde mis origenes,
creo que llegue tarde el día en que nací,
llegue tarde cuando decidieron que no era esperada pero igualmente bien recibida

he llegado tarde en muchos momentos de mi vida,
en el colegio,
en la cruz roja,
en el Liceo...
en la U... hasta el día de mi parafernálica y esperada por otros titulación.

Tarde...
a las juntas con la gente conocida,
a las reuniones con esos amigos que no quieres ver...
a los momentos en donde decidir,
tarde en el trabajo,
pero mas tarde en el amor.


Siempre tarde,
y hoy entre tanta vuelta de pensar,
en este fomingo empalagoso de vecinos pequeños, guaguas ajenas...
en medio de la desgana y el polvo acumulado en esta oscuridad que me acoge

creo que no ha sido casualidad,
esto de llegar tarde,
de evitar muchas y muchos
de marginarme inicialmente en forma voluntaria
y actualmente sin poder recular

Si lo pienso un poco más,
me siento como si cada dia estuviera a un metro de lo que sueño,
de lo que quiero,
a un metro de lo que mueve mi corazón
y acelera mi mundo
a un metro de ti...

y siempre,
siempre... me quedo retrasada,
no alcanzo
no te alcanzo,
no importa que me levante dos horas antes o que deje de domir por miedo a llegar tarde otra vez

No sirve,
está grabado en los prejuicios que me forman
está instalado en el disco duro de mis miedos
quizás esa sea la respuesta...
no estoy hecha para llegar con nadie
soy una particula de tardanza endémica
que no tiene ganas de ni de llegar a su propio atardecer,
ojalá que cuando sea el momento

cuando acabar con todo sea el unico paso por dar,
no me demore tanto y llegue a la hora,
al menos para terminar rápido con la fe de erratas


sol...

1 comentario:

chris dijo...

No por mucho madrugar, se amanece más temprano.
Sabiduría popular...
Besos.