Y tome un taxi con mi super maleta rumbo a la Estación de Seúl, en dónde tomaría el tren KTX de alta velocidad para salir rumbo a la ciudad de Busan o Pusan. Al llegar un señor mayor me ofreció insistentemente ayudarme con la maleta y termine por decirle que si. Subimos las escaleras mecánicas y llegando a la boletería el señor se quedó con mi maleta (yo miraba a cada rato desconfiada... claro me cuesta acostumbrarme a que no estoy en Chile y que no me robaran), compre en monosílabos el destino ¡Busan!, pague no me acuerdo cuanto pero no era barato y ahí quede no tenía idea para donde tenía que ir, la estación de Seúl es super grande. Nuevamente agradecí al señor mayor, quien tomo mi boleto, me dijo algo que no entendí y partió, yo lo seguí rápido (caminaba apuradito), cuento corto me dejó hasta el tren y hasta subió mi maleta, luego le dí una propina de 10 mil wones y le agradeci "kansamnida".
Ya en el tren que no iba lleno, se me ocurrió llamar por kakao Talk a mi hermana Paty y contarle lo que estaba haciendo, hasta que se me acercó una como "azafata" del Tren que me hablaba y o le entendía, salvo que me pedía que saliera ... ahí me asuste un poco porque pensé me echarían del tren o algo así... sólo cuando llegué a Busan y me baje, me di cuenta que en la puerta de entrada al vagón esta señalizado que no se podía hablar por celular dentro de él, tampoco escuchar música entre otras cosas que ahora no recuerdo....
Al llegar a la Estación de Busan, tan grande como la de Seúl, me fui por un taxi, con cuidado de no tomar los negros que son las más caros, ahí tenía que llegar a un hostel que había buscado en booking.com y en donde me encontraría con la Catalina, una chica de Argentina que conocí por couchsurfing, habías hablado bastante por mail, pero sería la primera vez en persona.
La llegada al Hostel fue como de película, pero eso lo contaré en la próxima entrada....
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